Carol and Julian Pearce han decidido poner fin a toda vida explotando cabras, para seguir en el mercado vendiendo queso vegano.
Siempre fueron una granja donde NO mataban a las cabras cuando bajaba su producción de leche, las cuidaban hasta que morían de viejas, y eso ya las diferencia del resto de empresas. Adoptaban todo tipo de animales desechados o heridos por la industria, cómo cerdos, vacas, caballos o gallinas.
A pesar de ser una granja considerada «ecológica» y de muy pequeña escala, sus propietarios eran conscientes del choque ético que debido a tener animales para su explotarlos como si fueran meros recursos o «mercancía» que valen según el dinero que generan. Hasta que un día dijeron, BASTA:
“Hacíamos lo mejor para nuestros animales cuando aún fabricábamos queso, pero una granja vegana nos permitirá hacerlo aún mejor”
Ahora su negocio es fabricar y vender queso sin haber explotado a nadie, y así mantener una granja donde los animales tienen una vida larga y feliz. Podéis visitar su página web: «Sanctuary at Soledad«. Han cambiado su eslogan a:
«Nuestro queso salva animales»
¿No es una historia maravillosa? Dejar atrás la esclavitud y explotación de los animales, para vivir en paz y respetarles… Son un ejemplo a seguir. ¡Felicidades Carol y Julian!
Fuente: Care2